Un domingo 2 de noviembre de 2008 nuestra ex compañera de labores fallece producto de un cáncer; el cual combatió con todas sus fuerzas hasta que no pudo más.
Sonia Lutgarda Jimenez Acevedo ingresó al Sindicato en Noviembre de 1992 mientras trabajaba para la empresa Cade Idepe Ingeniería y Desarrollo de Proyectos hasta que fue despedida de la empresa en mayo de 2006, ese año hubo 120 socios que se fueron de la empresa, 40 fueron renuncias voluntarias a la empresa o “mutuo acuerdo de las partes”, y el resto; 80 despidos, entre ellos Sonia. Eran los primeros avisos de una profunda crisis que hasta hoy vemos sus secuelas.
Durante el tiempo que estuvo en la empresa Sonia siempre se destacó por ser muy apegada a sus amigos y amigas de los distintas áreas de la empresa, con los cuales compartía a menudo en actividades fuera de las labores cotidianas del trabajo en la disciplina estructural, a la cual pertenecía.
Cuando le sobrevino la enfermedad Sonia no estaba en la empresa, no olvidemos que Cade Idepe fue comprado por Amec en la segunda mitad del año 2007, pero siguió, a través de sus amigos, los acontecimientos al interior de su antigua empresa hasta aquel día de noviembre de 2008.
Su compañero de toda su vida, su hija y su hijo recibieron todo el cariño en aquellos momentos.
Aquel día en el boletín del Sindicato escribimos lo siguiente:
“Fallece Sonia Jiménez. Culminó la dura batalla que dio Sonia contra el cáncer que agotó su vida llena de energía y cariño. Ingresó a la empresa Cade Idepe como dibujante estructural en el año 1992 hasta que fue despedida el 5 de mayo de 2006, donde cultivó una hermosa amistad con varios compañeros de trabajo.
Luego de haber trabajado unos meses en Akerkvaerner fue detectada esta enfermedad que se ramificó con tremenda violencia hasta este domingo 2 de noviembre cerca de las 15 horas en que su resistencia sucumbió. La recordaremos siempre con cariño porque ella supo entregar mucho afecto y dedicación.”
Y su familia escribió lo siguiente:
"Cada vez que recordemos a Chony, la veremos asociada a la presencia de sus amigas y amigos, de sus compañeras y compañeros de trabajo, de los amigos de su familia, también de sus vecinos.
Cuando quienes vivimos estamos preparados para recordarla, como ha quedado tan patente en esta dolorosa experiencia de su partida, damos a Chony esa especie de inmortalidad, de permanencia, de presencia constante, de vida en suma.
Nosotros, con fe y esperanza en esta comunión de amor, les agradecemos muy sinceramente sus palabras, gestos y acciones que comprometen nuestra gratitud.
Sebastián y Estefanía García Jiménez.
Héctor García valenzuela.
Sergio Jiménez Acevedo."
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